Una sonrisa para el viernes.Genial GOGUE para farodevigo.es.
viernes, abril 29, 2011
miércoles, abril 27, 2011
domingo, abril 24, 2011
DE PROCESIONES Y OTROS MISTERIOS
Por la mañana, Debeider entra en el templo con la abuela.
-Abuela, ¿quién es ese señor que está en la cruz?
-Jesucristo.
-¿Y por qué tiene esas heridas?
-Porque lo mataron los judíos.
Por la tarde, Debeider está de paseo conmigo y se nos cruza una procesión en la que va una Virgen con una espada clavada en el corazón.
-Papi, ¿Por qué lleva una espada clavada?
-Porque representa el dolor que sufrió cuando mataron a su hijo, Jesucristo.
-Yo sé quienes lo mataron
-¿Y quienes fueron?
-Los jodidos............
martes, abril 12, 2011
martes, abril 05, 2011
LA MEDIA
El sábado fue la previa, recogiendo los dorsales, tomando café con el Calderón de fondo, risas de niños y acento italiano; comiendo con buenos amigos que considero hermanos, compartiendo alegría con sus mujeres e hijos, las atenciones de Cholito y haber visto a Aurelita y sobris. Pena no haber visto a Andrews.
La tarde dedicada a hacer recuerdos paseando por Fuencarral, por el barrio de Moncloa, entre las calles Fernández de los Ríos y Galileo. Sábado completo. Incluyendo el gran regalo romano de Asensio.
El domingo por la mañana, la lucha del hombre contra el asfalto. Sudor, sufrimiento, lágrimas de emoción y las calles de Madrid, sin tráfico, para las quincemil personas que recorrimos veintiún kilómetros. La gente volcada, animando, empujando. Las articulaciones doloridas, pero la meta conseguida tras dos horas y doce minutos de tiempo neto, aunque el oficial fuera de dos horas y ventiún minutos.
En mi mente Miña Lúa y los peques, de manera constante, la fuerza que me ayudó a llegar.
El verdadero placer, haber comenzado la carrera abrazado a mi hermano, el Reencuentro y a su amigo Alberto, haber visto al rubito y a su hermano y haber quedado emplazados para acabarla juntos el próximo año. Toda una experiencia. Sobre todo el bife de después en La Vaca Argentina.
Gracias a todos por el ánimo y por las fuerzas en la presencia y en la lejanía.
En el momento de entrar en la meta, tuve una dedicatoria muy especial a un amigo de Cesantes. Él ya sabe los motivos.