-Conocer a los demás es ser inteligente. Conocerse a uno mismo es ser un iluminado y ése es mi caso, Señoría. Yo practico el Kundalini-Yoga y eso me ha permitido interiorizar en mi ser a base de experiencias increíbles, sin dormir muchas noches, cambiando los biorritmos, con ayuda del peyote y la cocaína, drogas a las que también he logrado vencer.
Así terminaba la declaración de la última persona que hemos asistido en el Juzgado. Había sido denunciado por maltrato en el ámbito familiar, por maltrato psíquico. Nunca le puso la mano encima a élla y, mucho menos a la hija de élla.
El principal problema de este supuesto maltratador es la falta de consciencia de la realidad que vive, tal y como ha manifestado el médico forense en su extenso informe. Necesita ayuda psiquiátrica. Entretanto, permanecerá encerrado, por su bien y por el de las personas que lo rodean. El tipo está convencido de haber alcanzado un estadio físico-psíquico que le permite levitar, ver la vida desde su chancra-corazón y considerarse un sabio que, en todo tiene razón, amenazando, constantemente, a quien no le siga el juego. Escucharle hablar, sinceramente, mete miedo. Ojalá los profesionales de la medicina logren ayudarlo.
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